domingo, 30 de septiembre de 2012

MONSTRUITOS

Entrada Original, Miércoles 21 de Septiembre del 2011 (ya es la última de mi antiguo blog)


A veces uno tiene tanto que explicar que no sabe cómo empezar. En mi caso, no tengo tiempo, y a veces no tengo ganas. Ya sé que tengo el blog bastante abandonado, pero no me voy a repetir y a prometer que… casi lo hago.

La entrada se podría titular “hijos de puta”, pero para no ser tan vasto o me acusen de que solo sé insultar, le he titulado “monstruitos”. También podría titularse “como pasar del amor al odio en cinco sesiones” “la nueva banda” y se me ocurren unos cuantos títulos, pero lo voy a dejar para mi intimidad, por si ocurren otras cosas.

No sé desde cuando se ha fraguado lo que voy a explicar, pero si os puedo decir que me ha hecho bastante daño. También os puedo decir que la puñalada trapera me ha llegado por sorpresa. Empezó todo por un correo electrónico, un correo en que me decía que necesitaba tiempo para olvidarme, ya que yo no le daba lo que él buscaba. Efectivamente eso es cierto. No le podía dar lo que él quería, porque yo no he pasado página del todo, y sinceramente, porque no me apetece empezar ninguna relación sería. Estaba muy a gusto tal como estaba, y le quería, pero no como él quería ser amado. No era amor, sino un gran cariño, una buena amistad, de hablar a diario todos los días, de reírnos, pelearnos… pero él prefirió dejar de hablarme durante un tiempo y que luego seríamos buenos amigos. No me llamo para decírmelo, sino principalmente me lo dijo por Facebook, será la nueva manera de “dejar” a alguien. Antes era por mensaje, pero ahora somos más modernos, lo próximo será dejar a la pareja, la amistad, o lo que se tenga por Twitter (de hecho algunos famosos ya han utilizado la herramienta para dejar a la novieta). Como estaba de vacaciones en Segur de Calafell (en mi casa, una de las primeras que compre no hay buena cobertura) a penas entraba en Facebook, y Twitter pues me costaba. Tampoco iba a entrar todos los días, ya que estaba con la familia. Mis tíos, mi primo David, su marido Alex, Lucia, mi hijo Asier, y después iban llegando más familiares de Ermua.

Cuando vi el mensaje en Facebook, solo faltaba que lo hubiera hecho en el muro…. Reconozco que me sentó fatal, cosa que supongo que a todos os sentaría mal, y fue cuando me di cuenta que me había eliminado. Me eliminó de todos las redes. Le escribí por Whasapp porque no entendía lo que estaba ocurriendo. Después fue cuando me envió el correo y me dijo todo eso. Que me amaba, pero que quería eso de mí, y como no se lo daba, pues que me tenía que olvidar por un tiempo y luego íbamos a ser buenos amigos y que me había borrado porque no quería, ni podía saber lo que yo estaba haciendo, o diciendo. Es cierto que le insulté, tengo un pronto muy malo… eso fue lo que me dijo, que soy buena persona, pero que mi pronto me puede… intenté disuadirle de que hiciera eso, que yo le quería y que me dolía lo que me estaba diciendo, pero era su decisión y no había marcha atrás.

El 5 de Septiembre ya me encontraba en Sídney, recién instalado, nos cruzamos con otros correos, incluso ya no cogía ni el teléfono… evidentemente no voy a desvelar las conversaciones, ni los mensajes, ni los correos, ni tan siquiera voy hablar mal de él (ellos) porque creo que no merece la pena, pero como escribir me calma, al final decidí hacer esta entrada.

Ya sé que muchos de vosotros estáis cansados de leer sobre este tema, pero yo os puedo decir, que no depende de mí, porque si la gente viviera sus vidas y no se molestaran en joder al resto, todo esto, ni lo anterior, no hubiera ocurrido. Pero para mí no está siendo fácil lidiar constantemente (cada dos meses como leí en un tweet), tener que justificarme con entradas, porque hasta el día de hoy, si alguien no me cae bien, o simplemente no me interesa, pues le dejo de seguir, sin más, que para eso tenemos esa opciones, pero no voy inventando historias, ni voy jodiendo como pretenden estás personas. Y sí, estoy agotado, y os comprendo, pero está vez, se trataba de un buen amigo, que de la noche a la mañana, sin saber bien el porqué, ha hecho lo que ha hecho.

No voy a entrar en más detalles, el resultado ha sido el mismo. Me dejó de hablar, inventó sobre mí. Porque voy aclarar que ha vuelto a coger algo que yo mismo he puesto en este blog. Un enlace de mi gran amiga Candice Tripp y como no escondo nada, pues lo digo abiertamente. Ella ya está al corriente de todo, es más, le sobre avisé de lo que había ocurrido. Ella siempre habla conmigo en castellano. Y en su blog, hay cuatro fotos mías, autorizadas por mí… y con eso han hablado hasta quedarse sedientos… hoy me toca a mí, mañana puedes ser tu. Con pocas palabras basta, con esto, quien me conoce, ya sabe de lo que estoy hablando y el resto que haga lo que crea conveniente. Pero que no incordien, que la vida son cuatro días, y si se sulfuran van a envejecer. Repito, quien quiera seguirme, hablarme, pues encantado, que siempre me ha gustado conocer a gente, pero los que crean a la “banda del patio”, pues que me dejen tranquilo. Es fácil, no pido más… y siento de verás que tenga que volver hablar del tema… pero necesitaba hacerlo para tranquilizarme. Tampoco os voy a taladrar, ni os quiero vender pena, pero como leéis en mi últimos tweets, mezclando con mi ironía y mi forma de ser, pues estoy hasta los cojones. Y así lo reflejo, así es mi estado, aunque también os digo que me he quitado un peso de encima, porque si realmente opinaban así, no sé por qué coño me seguían hablando y contestándome como si no ocurriera nada. Y si están tan seguros, pues que me denuncien, que yo ya lo he hecho, tal como os conté (creo que lo he contado, sino un resumen. Denuncié por todo el acoso recibido, insultos y decir que no existo; Twitter me paso todo lo que solicitó mi abogado)… es penoso, pero es así, y tarde un año, dos o tres, me tendrán que ver las caras.

Bueno, yo tengo la conciencia tranquila, estoy bien, y quería dejar reflejado en mi blog lo ocurrido. Y no he contado ni la mitad, pero como son cosas privadas, no quiero, ni puedo, ni debo contarlo.

Os dejó unas fotos reflejado en el espejo:






Ah, antes de cerrar la entrada, gracias a mis nuevos seguidores, a los lectores, y hacer un nuevo record de visitas. Y espero poder escribir más, pero el trabajo manda, y también estoy disfrutando de Sídney. Es mi cuarto año consecutivo, trabajando y disfrutando de esta bella ciudad. Creo que para mediados de Octubre, regreso ya para Madrid, pero nunca se sabe.

Besotazos de mi marca.

martes, 25 de septiembre de 2012

VISIONES DE MI MISMO

Entrada Original, Jueves 15 de Septiembre del 2011 (NOTA: como ya sabéis borre mi antiguo blog, y al recuperar las entradas, gracias a mi colega Francisco Javier, conocido por mi rubiales, las fotos no sé cuales exactamente puse en su día... solo quería hacer esta aclaración, ya que he agregado o quitado algunas)


Hola amigos, hoy escribo esta entrada, que no sé si va a ser larga o no. De momento he querido comenzar con un enlace que os llevará directamente a Noviembre del 2009, a Nueva York, en una galeria de mi querida ciudad. Las obras son de mi querida amiga Candice Tripp, de Londres, que esta triunfando allá donde va y yo siempre que puedo voy a verla. Como podréis ver salgo en el video y yo orgulloso que me siento. Tras el año nefasto (ya sabéis todo porque) Nueva York fue de nuevo mi refugio. De allí salí de nuevo reforzado. Este es el enlace http://www.youtube.com/watch?v=NbNuO2i1wWk



Así era yo cuando tenía casi dos años.



Aquí estaba yo en Nueva York, uno de mis primeros viajes, 18 o 19 años



En el metro de Londres




En está foto estoy irreconocible, con un pequeño pircing en la nariz, (no llevo pendientes, ni pircings, ni tattos, no me gustan... esta foto también fue en Nueva York en casa de unos amigos.




Yo haciendo el payasete, también en Nueva York (ya sabéis que es mi ciudad favorita)




En una galería de Londres



De punta en blanco.


Disfrazado en Halloween, en Sidney, me lo pase de puta madre




Con una ex novia, buena amiga (y si me estaba agarrando ahí)




Mi cumpleaños 2011 (7 de mayo del 2011)






Agosto 2011, Bilbao




Foto, 11 de septiembre del 2011 (Sidney)




Hasta aquí esta entrada que va dedicada a mi mismo, porque sí, porque me apetecía y porque yo lo valgo.

Besotazos.

lunes, 24 de septiembre de 2012

ASCO

Entrada Original, Lunes 1 de Agosto del 2011

 
Empieza el mes de Agosto, y la cuenta atrás está en marcha, para mi viaje inminente a Sídney. Unos 22 días más o menos me quedan para irme. Este año, no vamos a estar cuatro meses como los anteriores, ya que hay trabajo adelantado y no tengo que hacer tantas reuniones, ni presentaciones, como el año pasado. Me hubiera gustado quedarme ese tiempo, ya que mi pensamiento era quedarme el fin de año allí, pero, si no hay cambios previsto, estaré un mes o quizás dos, aunque si voy a contactar con nuevas marcas, nunca se sabe. Todo se irá viendo.

Esto evidentemente no me da asco, como bien dice el título de la entrada, pero era para introducir un poco lo que he comentado en Twitter, y porque no quería empezar a saco. Hoy, uno de agosto, he tenido bastante curro, bastante lió en la oficina, la mitad de la plantilla de vacaciones, muchas cosas que coordinar, y nada más irme a casa quería estar tranquilo, tumbarme y relajarme, pero no ha sido así. Nada más llegar a casa, estaba Lucia con su hermana y mi peque (ya pronto ocho meses) y querían ir al Corte Inglés de Vicálvaro. Primero me he dado una buena ducha relajante, hemos comido, y hemos ido en metro hacía allí. Lucia iba por trabajo, por unos carteles, y promociones (no se si os he contado, creo que si, ya hace tiempo, en una de mis entradas, que a Lucia le regalé una pequeña empresa de publicidad, más local, donde uno de sus trabajos, a parte de firmas que cuelgan sus posters en las marquesinas, pues hace cositas para el corte inglés, y la cosa le va muy bien; también me ayuda a mi).... pues eso, iba por trabajo y quería que le acompañara yo; no para negociar, sino que le parecía una de las ideas, y ya de paso, a comprar unas cortinas para su madre. No me he opuesto resistencia a ir, aunque sinceramente no me apetecía. Si acompañarla por el tema de su trabajo, no puedo decir más, sino pues comprar cortinas, mirar ropa, etcétera, no me apetece, y mucho menos allí. Pero bueno, como tampoco quería sentarme delante del ordenador, lo hubiera echo delante de al televisión, y hasta más tarde no iba a raparme, afeitarme y a recortar los pelos de la polla, y huevos, pues pensé, porque no ir...

Pues después de ponerme un pirata, mis chanclas, una camiseta "desigual", nos vamos todos para el metro. Menos mal que es agosto, y se nota que no hay mucha peña, porque no me apetecía oler más sobacos; porque no logro entender como a las 7.00 de la mañana hay peña que huele salvajemente mal; joder, puedo entender que después de trabajar, hayas sudado, y según que trabajo más, pero no logro entender que a las siete de la mañana se huela de aquella manera y tengas que soportar, a la vieja chiflada, o al pavo que escucha música sin cascos; no soporto eso. Y menos tener que oler a los demás... Pues bien, no había mucha gente, incluso Lucia se ha podido sentar. Yo llevaba el carrito de mi peque, que miraba con sus ojazos grandes a la gente, mientras llevaba uno de sus sonajeros en la mano. De vez en cuando se reía. Las señoras le miraba y les hacía tonterías.

Llegamos a la estación, y nada más pisar la estación de autobús, observo el movimiento que hay alrededor de los baños. Esos pajeros dispuestos a masturbarse delante de cualquiera; recordar que hablé de eso ya en la entrada de fnac. Pues aquí es doble o triple, y mucho peor. Los pajeros se huelen unos a otros y se alborotan cuando esta el guardia rondando. Se nota a tres leguas quien está allí verdaderamente esperando a alguien, o esperando que salga su autocar; o ambas cosas, paja y después viaje. Es así, y luego hablan de que el guardia los acosa o no sé que historias más; si no fueran a pajearse allí no serían acosados, eso os aseguro. No hace falta ser gran observador, pero es que la peña es muy descarada. Hasta la hermana de Lucia, comentó algo.

Salimos de allí y nos vamos para el corte inglés. Le doy zumito de naranja al peque; nos dirigimos a la oficina, mientras la hermana va a mirar cosas con su sobrino. La reunión va estupendamente, llegan a un acuerdo, todo ha salido según lo previsto (Lucia demuestra una vez más que mi presencia no ha echo falta). Salimos, encontramos a la hermana, y vamos hacer o van hacer la compra que tenían prevista. A mi peque le tengo que ir a cambiar el pañal, y así lo hago. Nos dirigimos hacía los lavabos, sin ganas de ir, pero era necesario; sin ganas de pisar porque se lo que me voy a encontrar, y la verdad no me apetece ver a un viejo, o no tan viejo, tocándose, o tocando al de al lado. Donde se cambian los bebes, que también sirven para los minusválidos, en la segunda planta esta ocupado. Supongo que lo estarán utilizando correctamente; ya me entendéis. Subimos a la tercera planta y también esta ocupado. Ya empieza a mosquearme eso. Intento abrir la puerta, pero se nota que no esta puesta con cerrojo, sino como alguien apoyandose. Toco la puerta, nadie me contesta. Abro, no está puesto el cerrojo, como preveía y me encuentro a un señor de unos 60 o 70 años, no es coña, no es exageración, con los pantalones bajados y un pavo de 30 o quizás algo menos, comiéndole la polla. ¿Por qué no me contestaron? ¿Por qué no cerraron con cerrojo? ¿Y por qué cojones están manteniendo sexo en un lugar público?

Espero que ahora nadie me diga, "deja ya de meterte con los viejos" "ellos tienen derecho" (no creo que nadie se atreva a decirme eso)... me da igual que sea de esa edad, o de un chaval de 18 años (o una pareja de hetero hubiera reaccionado igual). Eso que quede claro.
Mi hijo, evidentemente, y es obvio no sabe lo que está ocurriendo, pero yo sí. Les montó la marimorena, y la sorpresa es que el viejo se ofende y me insulta. No os creáis que se ha subido el pantalón, ni tan siquiera ha echo el amago, ni ha cerrado la puerta (al menos pudieron cerrar con cerrojo), sino que ofendido, refunfuña insultándome, como si yo tuviera la culpa de haberles pillado o vete tu a saber. Les montó la marimorena, y sin caer más en su juego y sin querer ver más aquel espectáculo (el chico joven salio zumbando de allí), les digo a unas mujeres que estaban esperando el ascensor, no sé si vieron algo, creo que sí, que hiciera el favor de avisar a unos de los guardias o a alguien; no quise ir yo, podría haberlo echo, pero si me iba yo el hijo puta, estoy en mi derecho de llamarle así, se hubiera ido. Sé que no servirá de nada, sé que no el van a decir o hacer nada, pero al menos en unos días por allí no aparecerá. El guardia tarda unos cinco minutos en venir, y yo al señor, con mi hijo, sin poder haberle cambiado todavía, en mi brazos, le digo que de allí no se mueva, que si le parecía bien lo que estaba haciendo; él estaba como asustado, y los insultos cesaron, pero tampoco se inmutaba demasiado. Difícil de explicar con palabras las expresiones de su cara. No quiero ni imaginar lo que estaba ocurriendo en los servicios de al lado o los servicios de la cafetería. Ya os dije, o eso creo, que en los servicios de la estación de la avenida América, he visto como un tío se la mamaba a otro, delante de los demás; éstos, al menos, aunque no es una justificación, no soy quien les va a justificar, estaban medio escondidos, lo que no entiendo es porque no cerraron con cerrojo, y menos aún, porque coño se tiene que hacer eso en un servicio público.

En definitiva, el guardia le pidió la documentación, se lo llevo y pude cambiar a mi hijo. Sé que mañana mismo, o quizás tarde unos días, volverá por allí, o peor aún irá a otro lavabo público a continuar con sus pajas o captura de algún joven que se la coma. Eso me da exactamente lo mismo, pero si mi hijo hubiera tenido dos o tres años y ve eso, os juro que le doy un puñetazo allí mismo. Que panda de sinvergüenzas y que asco me da que los homosexuales hagan eso en los servicios públicos. Creo que no tengo nada más que decir al respecto, porque con lo que he explicado, en está entrada y en otras, que mi postura ya sabéis cual es; no hace falta decir que vosotros estaréis de mi lado.

Pues nada más que añadir en esta entrada. Solo que tras cambiar a mi hijo y comprar lo que andaban buscando, nos fuimos a casa. Yo pude raparme, pude afeitarme y arreglarme mis partes intimas.

Un besotazo de mi marca registrada. Hasta la próxima.


lunes, 17 de septiembre de 2012

SEPTIEMBRE

En un principio, la entrada iba a titularse 1 de Septiembre, pero como la tónica es en general, pues he preferido llamarla como el mes que estamos.

Uno no siempre puede controlar lo que uno va sintiendo, sin darse cuenta, surge lo que tienes dentro y sale sin más. Ya he hablado muchas veces de este tema, pero es que es superable a mí.

Algunos dicen que Septiembre es parecido a Enero, un nuevo empezar, unos nuevos deseos, promesas, que son las mismas cada año, y que sabes que nunca se van a realizar, pero echando la vista atrás, a los ocho meses anteriores, intentado completar lo que nunca has empezado.

Septiembre es la época que vuelves al trabajo (afortunados quienes los tenga), que se regresa a los estudios, que dejas el tiempo libre, dejas de ir a la piscina, deja la playa, posiblemente dejas a un amor de verano (o dejabas), a nuevos amigos, a nueva gente que has descubierto y que algunos de ellos formaran parte de tu vida. Es como un nuevo renacer, es como una segunda oportunidad en el año, pero mucho deja de desear, al menos para mí, este odioso mes.

El 1 de septiembre nunca me gustó. Esté donde éste (los últimos años en Sidney), me pone triste, me pone de mal humor, me irrita, me trastorna, me trastoca, y haga lo que haga, esté con quien esté, es un día que me agobia. Siempre me digo el 31 de agosto que mañana no pensaré, como si se pudiera hacer y desconectare un poco del mundo, trabajaré con más ganas, con más energías, para superar el dichoso 1 de septiembre; para mí no equivale al 1 de enero, porque normalmente el uno de enero estás de resaca y no piensas en lo que dejas atrás, en lo que has podido dejar, hacer, etcétera, pero el 1 de septiembre es, para mí, como si comenzara el otoño, como si las hojas fueran a caer todas ese día, es como si no tuviera ganas de nada, como si no fuera a conocer más el amor, como si no fuera a volver a ver a la gente que quiero, es como si el mundo se me parara y mi mente viajara a tiempos remotos, a tiempos que no tienen sentido... es como si cada hoja que fuera a caer, se rompiera un pedacito de mi corazón.

Pero ese día pasa y septiembre avanza; me olvido un poco de esa tristeza y el sol resurge como si fuera puro verano; respiro de nuevo, las hojas están en su sitio, mi vida esta controlada, los sentimientos están seguros, mi corazón está entero, mi gente me oye, me ve, pero cuando ves que ya amanece más tarde, que la noche llega antes, que la gente va algo más abrigada, que el otoño se va acercando, que octubre está a la vuelta de la esquina, mi corazón se vuelve a encoger, y mis pensamientos están con ella. Las lágrimas están a punto de brotar, y la canción "answer" me vuelve acompañar.

17 de septiembre ha sido un día de esos raros, que te toca vivir, sin desear que llegue, pero que sabes que va a llegar; un día raro, de pasar de la pura euforia, a una tristeza, casi sin reconocer que se trata de ésta. Sabes que el tercer aniversario, realmente no sé si se le puede llamar así, va a llegar y que el otoño, la estación que menos me gusta, excepto cuando estoy en Nueva York, que allí parece otra cosa, se acerca, y estás de una mala leche casi irreconocible para la gente que a penas te conoce, pero que sabe que algo te pasa, pero que obvias el tema y entonces se me va un poco la cabeza (siempre he dicho que esa locura es sana), pero en estos momentos es triste. Esa tristeza, que tal como llega, desaparece, que con unas lágrimas, con una copa en la mano, una canción, una charla, unas risas tontas, un tonteo con un desconocido, incluso con la propia masturbación o la necesidad de que te reconozcan, se va. Desaparece por completo, sabiendo que volverá aparecer en cualquier momento, ya que sin empezar el otoño, se te va hacer largo.

Hoy he tenido ese día, raro, casi estúpido, irritable, gamberro, loco, solitario, y aquí estoy escribiendo la entrada, sabiendo que me va a desahogar, que las palabras que van saliendo del alma, se transformara en un alivio, quizás pasajero, quizás cubra las primera heridas, que surgirán un día u otro. Te dejas llevar y vas hablando con desconocidos, como si no lo fueran, y casi todo o algunas cosas te pueden sentar mal, pero no las evitas, porque necesitas ser reconocido, que te digan cosas agradables, casi sin quererlas oír, pero que te alivia, como el beso que nos daba nuestras madres en las heridas de la rodilla, que con la inocencia, creía que te curaban, y de grandes sabes que no es cierto, pero que con tu hijo, sobrino, primico, lo haces, porque sabes que a ti te aliviaba; y esas palabras que los extraños te dedican, te hace sentir bien, pero mal a la vez, porque sabes que no todas son ciertas, sabes que no todas son de verdad, y la barrera que tienes, la haces más fuerte, la construyes con buenos cimientos, porque no quieres resultar herido, pero las necesitas, porque todos somos humanos, y nos gusta oír cosas agradables. A veces, inconscientemente dices algo gracioso, para que se rían, o escribes algo para que lo lean, aunque en el fondo te da casi igual, y se mezcla con la necesidad, con el apoyo real.

Hoy le hubiera llamado, pero no lo he hecho, eso es buena señal, porque ya no le necesito. He pensado como estará, he pensado que estará haciendo, si hablará aún de mí, pero esos pensamientos se me fueron de la cabeza, porque era mejor así. No saber más. Bastante daño le hecho ya; hablando con un buen amigo, para mí lo es, con mi moreno, me di cuenta que he sido más cabrón de lo que yo me pensaba, y que yo también desaparecía y aparecía, sin más, solo porque sabía que tenía ese poder sobre la persona que más he amado; sabía que si le llamaba venía a mí, sabía que si le volvía a dejar de hablar, y le escribía un mensaje, volvía a tenerle en mi vida. Pero la decisión de que eso acabara fue mía, eso sí, antes le puteé una vez más, pero eso no lo voy a explicar, algo tiene que formar parte de mi intimidad. En ese momento me sentó bien, como un triunfo, pero hablando con mi moreno, me he dado cuenta que no.... hasta ahí puedo leer.

Son la 1:01 del día 18 de Septiembre, y hoy no sé que me va a deparar el día, solo deseo que Septiembre se acabe ya, pero no sé si es peor que llegue los primeros días de Octubre, mes que hará tres años que mi madre falleció (mi padre lo hizo en marzo), pero bueno, eso ya lo sabéis, y la verdad que no tengo ganas de hablar más del asunto.

Hoy intentaré pensar en el "hilo rojo", que a todos nos unen, y pasaremos hoja al día de ayer.

Sin más me despido hasta la próxima. Besotazos de mi marca.