martes, 21 de agosto de 2012

TWITTER

Entrada Original, Domingo, 17 de Julio del 2011

Hacía tiempo que quería hacer esta entrada, pero por una cosa u otra no la escribía. Más bien por falta de inspiración, que como ya sabéis últimamente he escrito poco; más bien nada, y tengo a medio terminar el relato. Ya es la tercera vez que lo digo, y no me pongo manos a la obra, pero bueno, hay otras cosas más importantes.

Bueno vamos al lío. Cuando entre en Twitter, el 7 de Diciembre del 2010, justo cuando nació mi hijo, entré porque me picaba la curiosidad de ver cómo era; había oído hablar de él, pero a nivel más americano, más de famosos y sin saber que la gente también tenía cuenta. La verdad que me gustó porque es más directo, más ameno y porque te enteras de todo rápidamente. Al principio no lo entendía muy bien, ya sabéis que soy torpe para estas cosas, pero bueno, me hice en seguida con ello, tampoco es tan difícil, y empecé a twittear con la peña, a agregar a mis colegas, a gente del facebook, y a nuevos amigos. La jerga no la entendía, en principio (follows, unfollows, etc.) y luego te vas haciendo.

De mis nuevos amigos he conocido gente maravillosa, que respeta, que habla con tranquilidad, opina, no juzga y me rio bastante con ellos. Vale la pena y nos llevaremos bien en la realidad. Incluso algunos de ellos, les tengo agregados ya en el facebook y algunos tienen mi teléfono (ya sabéis también que no lo suelo dar, y menos con las cosas que pasan hoy en día).

Bueno, tras una introducción, la entrada iba por otro camino. Me hace gracia que en las redes sociales se formen guetos que veo innecesario. Yo opino así por mi experiencia y por lo que he hablado con la gente. La mayoría de los “seguidores” son homosexuales. No hay problema en eso, para nada, sino que parece ser que cuando te abres una cuenta (a ver como lo digo para que no haya malos entendidos, espero que no) aparecen como moscas. Yo incluido, ojo, que también me cuento. En Facebook, la mayoría de mis conocidos (incluido mis colegas) son homosexuales, en Twitter, la mayoría lo son, excepto algunos/as… sé que no soy el único que ha pensado en esto, pero es curioso. Lo negativo, es que algunos no se abren más allá de la homosexualidad y se cierran en ese gueto sin querer hablar con nadie más. Están en su derecho, de hablar con quien les apetezca, pero eso nunca me gusto. Eso va correlativo a que respete el orgullo gay, que no estoy para nada en contra, de las manifestaciones, de luchar por nuestros derechos (siento ser pesado pero quería decir que yo soy bisex, porque veo que algunos se sorprendan que tengo un hijo), de luchar por la igualdad; hasta ahí de acuerdo, pero no me gusta encerrarme en un gueto y quedarme ahí parado. Me gusta expresarme en cualquier lugar, y reconozco que tarde en ir a Chueca. No por nada, no porque me vieran, no por que hablen, nunca he ocultado mi condición, siempre lo he dicho abiertamente, pero no sé, como dije en Twitter, compartido con muchos amigos, me siento orgulloso de ser como soy, en ese día tan señalado, como el resto del año. Ojo, que respeto el orgullo gay como el que más.

Pues en Twitter creo que pasa algo parecido a un gueto. Como he comentado, algunos se cierran en banda en hablar con heterosexuales y cuando se enteran que lo son (esto lo tengo contrastado con colegas, conocidos, amigos, seguidores) les deja de seguir o les deja de hablar directamente y nunca entenderé que eso ocurra. Todos sabemos que al revés también ocurre, y quizás el insulto aparece en sus mentes (maricón), pero al revés, dejar de seguir a alguien por ser heterosexual, de hablar, comentar, etcétera, me parece peor que el insulto. Conozco a gente que solo tienen amigos gays, incluso algunas amigas, y eso pues yo lo veo absurdo. Tanto en un lado como en el otro. Incluso hablan mal de ellos. Si queremos igualdad y un trato natural, tenemos que empezar por nosotros mismos. Esto conlleva a empezar a tratarnos por igual. Jamás entenderé que a un homosexual afeminado se le aparte o intente apartar por tener pluma, vulgarmente hablando y para que todos lo entiendan. Yo reconozco que para mantener relaciones sexuales no me gusta, pero no les aparto o les ignoro. Es solo un gusto personal, nada más, pero acribillarles con insultos me parece penoso. Y creo que sabéis de lo que hablo. Y sigue ocurriendo hoy en día; he visto homosexuales insultando a otro por ser más afeminado, por ser gordo, por ser… siempre acribillan con insultos para creerse mejor. Nadie es mejor que nadie, todos somos iguales y debería de ser así. No importan la condición, tu forma de ser. Te puede gustar o no, pero llegar a evitar…

Me he salido del tema, lo sé, que cuando arranco esto es un no parar; antes de seguir, no quiero que nadie me mal interprete, no quiero ofender a nadie, ni nada por el estilo, es más, quiero dejar claro que a mi Twitter me divierte, me lo paso bien, he conocido gente maravillosa, gente desagradable, gente estúpida, pero antes de criticarles, se da al botón de dejar de seguir y listo. Es como la vida misma, si alguien te cae mal, no le tienes a tu lado. Todo el mundo, sabe por dónde voy. Creí, ingenuo de mí, que en Twitter no iba a tener problemas; tranquilos, no me voy a repetir, porque ya lo he explicado. Lo único que si voy a comentar, que solo quiero que me dejen tranquilo, que yo comento lo que creo conveniente, subo las fotos que veo necesarias y no quiero hablar más del tema. Y lo más importante es que dejen en paz a mis familiares y amigos. Porque a mis colegas también le han ido molestando, a mi primo en Facebook le han dicho cosas que no vienen a cuento, y como siempre digo, la peña es libre de pensar lo que quiera, de hacer lo que quiera, pero no tienen porque tocarme los huevos, sin más razón, de hacer lo que me sale de los mismos... no tengo porque subir fotos que no me apetecen, no tengo porque decir lo que quieren oír, porque por suerte, siempre he sido libre en mi vida personal, pues lo seré más aún en mi vida virtual. Que ya está bien de oir bobadas... que yo no voy pidiendo fotos a la peña, y si lo he echo alguna vez, sería en broma, porque cada cual es libre de hacer y decir lo que le apetece. Los que me conocen, ya saben como soy, y con eso me quedo.

Otra cosa que ocurre en Twitter y que no entiendo es que la gente quiera tener seguidores a toda costa. No entiendo porque tienen ese afán de tener seguidores, y lo que es peor, que te siguen para que le sigas, y a los cinco minutos te dejan de seguir. Le dejas de seguir, y a los cinco minutos te vuelven a seguir, para que le vuelvas a seguir... y vuelta a empezar. Hasta que se te hinchan los huevos y ya no les sigues, aunque te parezca un tío legal. Yo no sé porque hacen eso, tampoco les voy analizar, pero lo veo tan absurdo, y no sé a donde quieren ir a parar. Al igual los que están mirando constantemente si es cuarto o no en su ciudad, como el puto gallego que si algún amiguito suyo se lo dice, seguro que se identifica. Algunos ya saben de quien estoy hablando, cuya persona esta denunciada. Me hizo una gracia ver su tweet, de que era el cuarto de su ciudad... pero viendo su facebook, no le tengo agregado, ni mucho menos, ya sé porque lo hace, por falta de cariño, y falta de personalidad. Es tan triste su vida, que tiene que hacerse el importante (al igual que dijo que un tweet suyo salió en antena tres). Que me da igual si es verdad o no, no juzgo eso, pero con una vez que lo dijera me era suficiente. La verdad que a penas hablaba con él, y la verdad que pensé en dejar de seguirle, pero mira, lo dejé ahí, porque de vez en cuando, decía algo que me hacía reír... pero tras ver su facebook y tras hacerse el interesante cogiendo enlaces de mi blog, y creer haber descubierto algo, pobre iluso, y de ser un puto cobarde, me dejó de seguir... no, no estoy preocupado, ni en aquel momento, ni ahora, pero joder, el tipejo ese le falta un tornillo. En fin, otra anécdota más.

Pues eso, que el Twitter también me he encontrado peña que es estúpida y que no sabe respetar al resto de twitteros, pero esa peña me la sopla... otra vez me repito, lo sé, pero es que el tema tiene tela y de ahí podría sacar un libro de psicología, para que la gente aprenda a respetar. La peña no saben vivir sin molestar, pero ellos sabrán y sobran en mi vida. Al igual que yo sobraré en las suyas, cual cosa no me preocupa en absoluto. Me quedo con la gente que me habla a diario, con la gente que opina, habla, con respeto y no juzgan... no solo lo digo por mí, sino que no juzgan en general. Evidentemente cada cual tendrá su opinión y así lo hacen saber en 140 caracteres, pero hay que saber opinar con respeto y ser contundente en lo que defiende, pero para eso no es necesario caer en el insulto. Si aprovechan la plataforma para insultar mal vamos. Pero hay gente para todo, y que se le va hacer, si la gente es así, que solo sabe insultar o se deja llevar. Hay gente que me cae bien y otras no, y es tan sencillo como pasar de ellos, sin más, y no tener que estar peleando cada dos por tres, aunque a veces, en más de una ocasión he caído en la trampa y he dado respuesta a alguien que no se la merecía. Y he caído también en el insulto fácil, pero os lo puedo asegurar que en más de una ocasión me he mordido la lengua y he pasado del tema. No puedo desaprovechar mis 140 caracteres en esa peña que no merece la pena.

Y creo que sobre el Twitter no se me olvida nada más, y si hay algo que se me olvida, pues lo comentare en otra ocasión, porque esta entrada ya he dicho lo que tenía que decir. Tan solo, añadir, que digan lo que digan, estaré al pie del cañón, moleste a quien moleste, y punto. Bueno, pues cierro esta entrada, agradeciendo a la gente, me siga o no me siga, que habla con respeto. Un beso para todos.

Hasta la próxima.

lunes, 20 de agosto de 2012

EL TIEMPO PASA RÁPIDO.

Quien pudiera controlar el tiempo y poder pararlo en algunos momentos y en otros acelerarlo. Hace nada estábamos celebrando el fin de año y en breve Agosto se acaba. 8 meses que nos ha pasado por encima, de este 2012, y casi sin darnos cuenta. Muchas cosas han sucedido en el mundo y en particular, está siendo un año lleno de trabajo, de viajes, de aventuras y de conocer gente. Un año que tal como escribí, está siendo diferente a otros años, a nivel profesional, porque en lo personal, pues como otro año cualquiera, aunque sinceramente travesando una etapa bastante buena y dejando realmente el pasado atrás. Eso a veces es duro, es difícil, pero creo que lo estoy consiguiendo; no digo que sea malo echar la vista atrás, pero necesitaba avanzar y no pensar en él, sobretodo en él. Estaba atrapado en un bucle, que no estaba siendo positivo para mí; sobre todo para mi corazón, porque en el resto no me estaba afectando; o al menos no tanto. La verdad que la etapa tan buena que estoy atravesando, anulaba los pensamientos hacía él, pero era necesario, casi obligatorio, el cerrar esa etapa definitivamente; el corazón tiene que curarse a su debido tiempo, y cicatrizar la herida. Para eso hay que cerrar etapas y abrir otras nuevas. Pero se debe cerrar definitivamente. No podía continuar estar pensando él, sabiendo que lo nuestro no iba a ser ya nunca más posible ya que nuestra relación tan tormentosa no nos llevaba a ninguna parte. Supongo que a todos nos ha pasado esto alguna vez, de estar pensando en la persona que amas, aún sabiendo que no puede ser; en definitiva, esa etapa se está cerrando, con precaución y sobre todo en buena compañía.

Ya sé que a lo mejor no entendéis nada, pero como el que lo tiene que entender soy yo, creo que con esto es suficiente; no quiero alargar el tema y el resto se queda en mi intimidad, que demasiado habéis visto de mí…. ¡jeje!

Hoy ya 20 de agosto del 2012, y el spot más importante lo terminaremos hoy; mañana el otro y hacer de nuevo maletas para Sídney. Que ganas de llegar y de ver a mis viejos amigos, ver la nueva colección de “aussiebum”, que seguro que me regalan algo y emprender los nuevos e importantes proyectos que tengo entre manos con los australianos; todo va viento en popa, los proyectos se enlazan unos con otros y las energías continúan cargadas. Estoy aprovechando los buenos ratos libres que tengo, con algunas salidas nocturnas, con cultura, viendo amigos que hacía tiempo que no veía, con alguna fiesta privada, cerrando otros contratos, abriendo nuevos y todo con la positividad que me caracteriza. Mi equipo en Madrid poco a poco se van a ir incorporando y Susana está haciendo un trabajo excelente; al igual que Eloy, lo está bordando. Está llevando parte de mi agenda estupendamente y los proyectos con las firmas españolas están más que bordadas. No me puedo quejar de lo que está saliendo de sus cabezas y está más que genial.

Mi hijo sigue en Menorca y para el 26 de Agosto ya estará en Madrid. Lo está disfrutando y cada día hablo con él; me ha explicado que está casi todo el día en el agua, que ha montado en barco y que está comiendo mucho. Que tiene muchas ganas de verme y de darme un regalito que me ha comprado… yo también tengo ganas, muchísimas, de verle, de darle besos y achucharlo; pero bueno, el tiempo pasará rápidamente y el 10 de septiembre, es la fecha prevista de mi regreso a Madrid, le podré ver; o al menos al día siguiente, ya que con el cambio de horario (ahora mismo está en 8 horas de más, de diferencia) quizás hasta el 11 no le vea. No tengo la fecha cerrada, pero he calculado tres semanas allí; no estaré en todas las grabaciones, ya que normalmente suelo ir tres meses, y con tres semanas sabemos de sobras que no son suficientes (era obvio), pero no puedo estar más, por cuestiones profesionales y compromisos (son tantos) y ellos lo han entendido, al igual que los neoyorquinos; si hablando se entiende la gente, hablando con educación y formalidad se llega a buenos entendimientos.

Pues esa tres semanas las voy aprovechar al máximo, visitare mi pequeño hotel (para los nuevos lectores y los antiguos, os recuerdo que tengo un pequeño hotel allí), visitare a los que ya considero buenos amigos, disfrutare de mi estancia, trabajare mucho y lo que pueda me conectare con vosotros. No sé si mucho o poco, pero al menos mantendré el contacto. Algunos echare de menos a otros no tanto eh ¡jeje! Pero bueno, espero poder continuar estableciendo esa bonita amistad que se está formando con muchos de vosotros, cual cosa me hace sentir bien, ya que hay gente muy maja que realmente vale la pena.

Pues nada, creo que con lo que he escrito por hoy es suficiente, y ya mucho tiempo no me quedaba antes de meterme de lleno en la grabación; cuando pueda escribiré una nueva entrada o subiré las que me quedan del antiguo blog, que por cierto ya son bien poquitas (ahora mismo no recuerdo cuantas, pero creo que son 3 o 4; por cierto la casualidad ha hecho que esta entrada vaya después de la entrada “cerrar página, escrita el 10 de Julio del 2011). Pues bien, os mando un fuerte besotazo de mi marca y hasta la próxima.

jueves, 16 de agosto de 2012

CERRAR PÁGINA

Entrada Original, Domingo 10 de Julio del 2011

Hay momentos que es necesario cerrar un capítulo de nuestra vida y avanzar por el sendero donde queremos llegar. Yo creo que parte de nuestro destino está escrito, pero no nos podemos quedar de brazos cruzados esperando a que ocurran las cosas. Quizás, ese sea nuestro destino, estar parado, sin hacer nada, y esperar… yo me niego a estarme quieto, a dejar pasar el tiempo, y siempre intento llegar a la meta. A veces uno lo consigue, otras no, pero el esfuerzo vale la pena. ¡Estamos vivos!

En un capítulo (más de uno, creo que eso está claro) de mi vida, no he llegado a la meta, y aunque lo he intentado en más de una ocasión no ha podido ser. No pasa nada, la vida sigue, y yo he decidido pasar página. Bueno, para ser sinceros, decidieron por mí, o esa persona, decidió pasar página de verdad y salir del bucle en que estábamos metidos. Me es difícil explicar todo con exactitud, por respeto a la otra persona, que no tiene porque salir en mi blog, y no tenéis porque saber quién es. Algunos lo saben, es obvio que mis colegas, los más allegados, saben de lo que estoy hablando, incluido Jordi Sans. Y es un poco difícil intentar lo que siento, o sentí en su momento, sin poder contar los detalles, pero intentare explicarme.

En esta vida he amado con locura a dos personas. Una de ellas, Lucia, la madre de mi pequeño, que por cierto, ayer 7 de julio del 2011 hizo ya siete meses… hemos pasado juntos muchas historias, movidas, peleas, reconciliaciones y la vida como da muchas vueltas, hemos acabado teniendo un hijo junto, viviendo una temporada juntos, siendo grandes amigos y todo eso que ya he explicado anteriormente. Nuestro cierre fue temporal, y ambos nos fueron bien, aunque yo en aquella época no lo aceptaba, y sufrí bastante. El amor tiene varias caras, más de una diría yo, y bueno, se superó con mis historias y folleteos, para que decir otra cosa, si fue así. Y luego, nos volvimos a reencontrar, a retomar la amistad hasta el día de hoy. El resto de la historia ya lo sabéis por lo que he ido explicando. Repetirme ahora sería absurdo.

Mi otro gran amor, fue un chico, y aquí es cuando viene lo difícil porque si doy detalles se va a identificar. No es ese el problema, sino lo que he comentado anteriormente. Solo diré que nuestra relación fue un tira y afloja constante, llena de peleas, baches y sexo. Dejemos la relación en más de una ocasión, y la volvíamos a retomar pero cada vez iba a peor. Yo con mi gran carácter, orgullo, hacía y deshacía a mi antojo, aunque también hay que decir que él siempre estuvo ahí en los momentos malos; no toda la relación era mala, pero se iba deteriorando por falta de entendernos, mis viajes, mis movidas… pero él tampoco se quedaba atrás. En definitiva, hace poco, él ya con pareja, decidió cerrar página de una vez por todas. Como he dicho, nuestra relación amorosa se acabo, pero manteníamos conversaciones de vez en cuando, a veces casi a diario, y volvíamos a enfadarnos. Mejor dicho, me volvía a enfadar, y entonces le decía cuatro cosas, que sé que le iba a joder, y vuelta a empezar. Y vuelta a empezar, hasta que hace poco, cerró página y me dejó de hablar, sin más, sin querer saber nada de mí, ni bueno, ni malo, aunque aún nos tenemos en el facebook. Pensé que me iba a borrar de ahí también, pero no lo ha hecho. No sé si leerá mi blog, vamos que ya no sé nada de él. Por su muro se que continua con su novio, y confieso que he mirado sus fotos en más de una ocasión. Fue su decisión, y la respeto, pero no la comprendo. Y por eso es hora que yo cierre esa página, y avance mi camino sin mirar atrás o intentar no mirar atrás, para no volver a tropezar una y otra vez en eso. Sé que fue cansino, pero el amor entre nosotros dos era verdadero. Fue dañino en más de una ocasión, pero tengo muy buenos recuerdos, y él seguro que también. Hay que quedarse con lo bueno e intentar borrar lo malo, pero de lo negativo también se aprende y si, cerrar ese capítulo va a ser positivo para mí. No es que lo esté pasando mal, porque la vida me sonríe, pero es ya por necesidad, que por otra cosa. Por eso, una de las razones que me he cambiado de ático. Como dije, desde el 18 de Junio del 2011, me cambie de casa, como dije en mi anterior entrada, porque tengo esa oportunidad de por hacerlo. Demasiada carga emocional, no solo por ellos, sino por cuestiones de familia, que tengo demasiados recuerdos, demasiado peso… ya sé que los recuerdos están en mi mente, y es inevitable pensar, joder, sería jodido no poder recordar (bastante mala memoria tengo ya para las fechas) para dejar de pensar en tus seres queridos. Lo vi necesario y así lo hice. Espero poder pasar página, tal como ha hecho él, aunque con nosotros dos nunca se sabe si algún día regresaremos al punto de partida.

Y en mi ático nuevo estoy, y aquí empezare mi nueva etapa. E intentar mejorar las cosas de uno mismo.

Quizás a la tercera pareja va la vencida; he tenido algunas más, pero he destacado las dos más importantes, porque una de mis relaciones, os puedo contar, que después de dejar mi relación con ella, me visitó a la oficina, intentando meter un susto con un embarazo, que no lo era en absoluto; después de no conseguir nada, regresó de nuevo a mi oficina, y me dijo que cuando iba a recoger las cosas que tenía en su casa, y cuando la dije que lo tirara o que hiciera lo que quisiera, se marcho por la puerta y casualidad de la vida me la crucé un día por Neptuno. Nunca más se acercó a mi oficina, que yo sepa. Y bueno, folleteo todo lo que he querido y más, pero eso también lo sabéis. Pues como iba diciendo, quizás a la tercera va la vencida y encuentre mi amor definitivo. No sé si estará escrito o no; aunque también puede ocurrir que continúe soltero y folleteando. Al cuidado de mi hijo que amo con locura. O quién sabe si acabo de nuevo con Lucia, como algunos piensan, aunque lo dudo, tanto ella como yo. Estamos bien así, juntos, pero esto no va a ser eterno, ya que cuando el peque tenga un año y pico, ella regresará a su casa, o cuando tenga dos… y como os dije, quizás queramos tener un segundo juntos… Pero como eso no se puede saber, pues ya se verá lo que va ocurriendo por estos lares llamado vida.

Creo que no tengo nada más que añadir, de momento, sobre este tema, y voy cerrando agradeciendo vuestras visitas, que son muchas, cada vez más. Y como os dije, tengo que terminar el relato que dejé atrás. A ver si saco tiempo. Besotazos.

lunes, 13 de agosto de 2012

DE TODO UN POCO II

Entrada Original, Lunes,  4 de Julio del 2011

Cuanto tiempo sin escribir en el blog. Creo que es la primera vez, desde que empecé, que en un mes no he escrito nada. Tengo el relato abandonado, sin terminar de escribir, no he dicho ni mú desde el 19 de mayo. La verdad que he andado bastante liado, con el trabajo, con mi hijo, con los proyectos, y con los últimos acontecimientos ocurridos.

No sé ni por donde empezar. Como se suele decir, mejor por el principio, pero tengo un poco de desorden mi cabeza. En fin, vayamos por partes, lo haré lo mejor posible:

En primer lugar, quiero deciros que estoy instalado en mi nuevo ático. Hicimos el traslado en tiempo record, tenía gran necesidad de salir de mi otro ático, que se quedara Eloy con el, por motivos que ya sabéis o imaginais. Alli tenía demasiado recuerdos, demasiadas cosas que olvidar y la necesidad de pasar página era inminente. Recuerdos familiares, recuerdos amorosos, recuerdos que no voy a olvidar, pero salir de aquel espacio para mi era vital; y como puedo permitírmelo, sino me jodería, pues, busqué, y encontré. Dicho y echo, me instale en dos días, con ayuda de mis grandes amigos y de mi Lucia, que de momento, continua viviendo conmigo. Supongo que estará un tiempo más, incluso regresara conmigo a Sidney. No me quiero extender más sobre este tema, supongo que algún día le dedicare una entrada para esto solo, pero de momento dejo esta pincelada.

El trabajo también me ha ocupado bastante tiempo, y lo seguirá haciendo. Aunque mi horario, nuestro horario, es hasta las tres, muchas veces trabajo desde casa, y ultimamente ando poco por la redes sociales. Incluso este domingo pasado, tuve que ir a grabar una publicidad, de una marca de Whisky. Todo fue bien, pero el pedo que agarré fue impresionante. Llegue a las cuatro y pico de la tarde, y me acosté directamente. El trabajo para Milán esta más que realizado, y cobrado, pero no sé cuando quieren grabarlo. Ellos sabrán. Y poco más que contar sobre el curro, que tenemos muchas campañas, muchas cosas que hacer y bueno, todo esta genial, no nos vamos a engañar.

Sobre mi vida personal, pues, a parte del abundante trabajo, de pasar el tiempo con mi hijo, ver a mi familia, venir a verme, estar con Lucia, comprar, pues he salido un par de veces con mi primo, he ido al cine con Lucia y me he quedado, por cuarto año consecutivo sin vacaciones. Una vez más, no he podido cogerme ni un par de días y si los he cogido he estado trabajando en casa, o he estado grabando... pero bueno, al menos el viaje a Australia, me lo va a compensar, pero joder, cuatro años sin ningún tipo de descanso, de desconexión, pues jode bastante, por mucho viaje que haga. Parece una queja, aunque no lo es, o si, un poco si, porque tenía pensado cogerme una semana, e irme con Lucia y mi peque (que pronto ya siete meses) e irnos a la playa, sin móvil, sin portátil, desconectar de verdad, pero el trabajo, una vez más me lo ha impedido. Lucia se conforma, pero se que la fastidia. Ya le dije que se fuera ella, que no había ningún problema, pero no sé porque, no quiere hacerlo. La veo muy contenta, estando conmigo, pero parece que el pasado, también esta con ella; es decir, que como cuando eramos pareja, no podíamos hacer nada juntos, o casi nada, y otra vez estamos igual, aunque esta vez como grandes amigos... pero bueno, las cosas están saliendo así y así nos lo tomamos.

Y sobre el acontecimiento del Twitter, pues mejor pasar del tema. No me sorprende, ya me ha pasado otras veces, pero si que me da pena esa pobre gente, que no tiene vida propia y que tiene que buscar información en mi BLOG, para después dar entender que han estado investigando. Es que es muy fuerte, coger fotos mías, sin marcas de agua, tengo las originales colgadas en mi facebook, cuenta que me recuperaron presentando mi NIF, cosa que conté en mi blog, para decir, sin pruebas, que la campaña Tyronne es... pues mi nombre. He sido ingles, he sido alemán, ahora búlgaro, origen escandinavo.... es que cada vez, según esta gentuza, gentucilla, y me muerdo la lengua, me dicen que soy de un origen distinto. Pero malditos perros, Tyronne es el nombre de la campaña que hice para Nueva York... y joder, tan facil es dejar de seguir, como seguir y estar jodiendo... quien haya leído mi blog, sabe que en el facebook también hay gentucilla como ellos, saben mi vida de pe a pa, porque yo lo he contado, porque la cuento, y la contaré. Pero son tan absurdos, de coger un enlace, que yo mismo he puesto en mi blog, y contar mentiras desde un ordenador, sentados en sus casas, amargados, y creyéndose importante, cuando nadie tuvo huevos de presentarse en plaza de las cortes, el día, y la hora que dije, ya que estaban importunando, incluso a mis colegas. Incluso hablan con mi primo, fíjate si son cortos, y les habla mal de mi. Prometí no hablar del tema, no incluir nombres, además, esa gentucilla están más que denunciados, y lastima que la justicia sea lenta. No por mi, sino en general, pero quien ríe último ríe mejor. Sobretodo por una persona que yo me sé. Podría hablar más del tema, pero ya no sé si vale la pena. Y si, reconozco que me afecta, y tanto que me afecta, no voy a decir lo contrario, pero no es la primera vez, solo espero que sea la última. Por mala suerte mía, sé que no. Pero bueno, yo sigo a mi aire, colgando mis anuncios, incluyendo fotos mías, más claro que agua, y el resto ya me la suda. Ya llegará mi turno, cuando la justicia haga lo que tenga que hacer. Y tengo todas las pruebas, gracias que twitter me las envió, un gran administrador, y desde aquí les doy las gracias.

Como no quiero terminar con mal sabor de boca, desde aquí, agradezco el apoyo recibido, y la amistad que me habéis brindado la mayoría de vosotros. También a mis nuevos seguidores de éste blog, que espero poder escribir más a menudo, incluido terminar mi relato, lo siento, y bueno, que nos vemos en Facebook, Twitter y donde haga falta. Todos los días paso por plaza de las cortes, así de sencillo. Y perdonar las faltas de ortografía.

Besotazos.

jueves, 9 de agosto de 2012

EL ABUELO


Pep Mascaró, el abuelo del spot de Coca cola, ha fallecido a los 105 años. Como ya sabéis, participe de pleno en esta campaña, todo un lujazo el haberle conocido, y en haber creado esta gran campaña, para mí, una de las mas importantes de Coca cola de los últimos años. Es todo un lujazo por su gran humanidad, su gran sentido del humor y porque ha visto crecer a sus hijos, nietos, biznietos, sobrinos, etcétera, en una absoluta felicidad. Su gran frase “lo único que no te va a gustar de la vida es que te parecerá demasiado corta. Estas aquí para ser feliz” se lo dijo a su nieta, al nacer, cuyo spot recoge en vivo; realmente está basado en hechos reales, sin trampa, sin cartón. La verdad que fue un lujazo el haber estado presente, el haber presenciado ese gran momento; el abuelo, un gran hombre, todo corazón, sabio, un buenazo y eso lo transmitía desde el primer segundo hasta el último, tanto en el spot como en su vida. La frase, le iba al dedillo, ya que era su máxima, que le dio reconocimiento y era puro reflejo de su vida sencilla. Fue un hombre plenamente feliz.

Ayer me enteré, por las dos webs, que suelo consultar, y luego me mandaron un correo. Me estremecí, y les di mi gran pésame a familiares, amigos, porque era un hombre muy querido; incluso en su pueblo, la plaza lleva su nombre. Antes había participado en una serie para IB3 (televisión balear), pero continuaba siendo pagés, lo que más le gustaba en la vida, como su padre. El ser reconocido por el spot, no le quitaba el sueño y no le cambio nada. Quizás por la edad, pero la gente que le conoció, sabe realmente que no era por eso, sino por su gran humanidad.

El spot, se grabó en el 2009, año que no fue nada bueno para mí, por lo que ya sabéis... Un año horrible, que esta campaña, me alegró un poquito mi vida, con su gran vitalidad, con su energía. El abuelo siempre estará en nuestros corazones.

Ayer también falleció Sancho Gracia, nuestro “Curro Jiménez”, y desde aquí les doy mi pésame a sus familiares.

La vida es así, y a veces muy injusta, pero la muerte, de una manera u otra nos llega a todos; de eso no nos podemos librar, pero morir siendo feliz, siendo realmente como eres, para mí es lo “más bonito”, ya que si has vivido intensamente, has vivido como quieres, haz disfrutado, lo has transmitido, uno puede morir en paz. Y el abuelo así lo ha vivido, ha disfrutado y es un gran ejemplo. Yo, estoy consiguiendo esa máxima, lo estoy haciendo propio, y los que me conocéis, habéis leído el blog, sabéis que siempre hago lo que me apetece, y mi trabajo es mi gran pasión. Así que, os aconsejo que viváis la vida al máximo, disfrutando al máximo, todo lo que podáis; ya sé que no siempre es factible, ya sé que a veces es imposible, que es difícil, pero nadie dijo que la vida lo fuera. Yo siempre digo que “vivo la vida como si tuviera dos” y así no se me escapa nada.

Pues esta entrada va dedicada para el abuelo más entrañable, un gran hombre, que seguro de donde esté seguirá cuidando de los suyos.

Hasta la próxima.

martes, 7 de agosto de 2012

RELATO VII (XII)

Entrada Original, Jueves 19 de Mayo del 2011


IX


He oído el mensaje dos o tres veces más para asegurarme que es verdad. No me lo acabo de creer del todo, pues no entiendo porque María quiere quedar conmigo. No la conozco, tan solo la he visto en la maldita cena y creo recordar que en alguna otra ocasión, pero no estoy seguro de eso. Si que voy a ir a la cita, pues me intriga porque me ha llamado; además, puedo hacer grandes averiguaciones a través de ella, sobre Marta, porque se fue llorando de la gran sala y como que pudo pasar aquella puerta; no sé lo que habrá detrás, que secretos guardan sus paredes, que silencios, cuantos temores, que miedos esconde Marta, porque la cerraba cuando vivía con ella, y sobre todo porque nunca quiso hablar del tema. Y porque María, desconocida para mí, pudo entrar con seguridad, como si hubiera estado más de una vez en la gran mansión, y supiera que se esconde allí. A parte de todo esto, también me intriga bastante porque ha esperado a que me fuera de casa y no lo ha hablado durante la cena. Si fue capaz de romper un silencio cortante, afilados como cuchillos, esperando a su próxima víctima, porque no dijo nada delante de los demás y desenmascaraba de una vez a Marta. Bueno, yo tampoco fui capaz. Quizás ella no tiene nada en contra de ella, aunque me extraña. Desconozco de que conoce a Marta, que hacía allí con nosotros, ya que no la vi relacionarse con nadie. Excepto con Carlos. Cuando entre al gran salón, ella estaba solitaria, ausente, y no la vi hablar a penas con nadie. Solo palabras sueltas, quizás por amabilidad, un saludo, un gesto y si cuchicheo con entusiasmo con Carlos. Fue capaz de hablar con esa seguridad, pero no la vi habladora. No sé, como la cena fue tan extraña, quizás le esté dando demasiado vueltas.

Creo que el resto de la noche no voy a dormir bien, pensando en mañana, en la cita, en averiguar todo. Tengo el poder en mis manos, que por otra parte, me quema, porque puede no salir bien. Pero si resulta tal como debería, podré ir a su casa y decirla todo, sabiendo que tengo ese as guardado. Pienso decirle todo. No me callaré nada, le dejaré en ridículo y limpiare mi imagen, recuperando mis amigos, a los verdaderos. Demostraré que ella es la mala y que yo fui una víctima más de su poder, de sus grandes influencias. Y por fin podré descansar.

Subo, con gran cansancio, las escaleras para ir a mi habitación. No me he llegado a terminar la última copa. Me pesa el cuerpo y casi no puedo caminar. He fumado demasiado. No tengo ganas de lavarme los dientes; me sentaría bien una ducha, pero no tengo ganas. Me contradigo con mis ideas. Pondré la radio un rato, para oír mi programa favorito, a ver si así me relajo y mañana voy lo más fresco posible a la cita con María. Tengo en mis pensamientos, grandes preguntas; necesito averiguar todo y atar bien los cabos. Me vienen imágenes de la fiesta y recuerdos del pasado. Grandes recuerdos, algunos bastantes buenos. Aquellas fiestas maravillosas que los dos organizábamos, pasándolo en grande. Subastas para los nuevos ricos, cosa que siempre me opuse; la gran orquesta, del norte, venían a tocar sus grandes éxitos; amenizaba la velada y los invitados disfrutaban realmente, hablando, bailando, riendo. También hacíamos grandes tertulias, sin dejar ningún tema en el tintero. Ningún problema, hasta que estallo la guerra en casa. Las fiestas, se convirtieron en infiernos para mí. Eran los nuevos amigos de Marta que invadían con hipocresía la mansión, hablando solo de dinero, negocios, cuadros, petróleo… dinero y más dinero. Asistí a bien pocas, pero solo para contentarla e intentar salvar nuestra relación. No sirvió de nada.

Me desnudo delante del espejo. Creo que he engordado durante estos últimos años. Me veo viejo, con canas instaladas en mi cabello, y arrugas en mi cara. No me importa envejecer, pero me hubiera gustado hacerlo al lado de la persona que ame. Me asusta la soledad, me da miedo pasar el resto de mis días hablando conmigo mismo y no poder sentir el cariño y el calor de una mujer. No creo que vaya a tener hijos a estas alturas. Ahora, recuerdo a Esmeralda, aquella relación sí que hubiera funcionado. No debí de ir a Praga. Ir aquello tampoco me sirvió para mucho, porque no se llegó a ningún acuerdo. La novela, mi gran novela, no se público y eso me jodio bastante. Las ventas de libros había bajado bastante, esa fue la excusa; me dieron falsas esperanzas durante un tiempo, pero no se llegó a publicar. Ni tan siquiera me dijeron el porqué. Dejé de escribir, no por esto, aunque si fue un golpe duro, sino más bien por el amor que sentía hacia Marta; ella me absorbía todo mi tiempo. No sé porque recuerdo a Esmeralda, una mujer tan bella, maravillosa, que por mí culpa se acabo la relación. Eso sí que lo reconozco. Y ahora, estoy solo en este gran apartamento, lleno de lujos, rodeado de regalos de Marta, regalos innecesarios, sintiéndome muerto por dentro, en mi gran soledad, en un vacio que me llena el alma… paradoja de la vida. No sé porque, pero pienso que seguiré así por mucho tiempo. La esperanza, supongo que la dejé en la gran mansión, cuando vi a Marta por última vez. Pero idiota de mí, pensé que podía recuperar el destello, cuando recibí la invitación. Me dejo helado leer aquellas frases, tan cortas, tan cursis, al estilo que ella solía escribir para todas las fiestas, para aquellos fracasados de los nuevos ricos. Sí, me sorprendió ver que estaba invitado, viendo el final del camino de mi amargura, de vengarme y de poder recuperar mi vida de una vez por todas. Pero tampoco ha servido de nada. Por eso, mañana no puedo perder el tiempo con tonterías e iré al grano cuando vea a María. Diré lo que pienso, lo que siento, sacaré la verdad, nada más que deseo eso, para hundirla. No debería de pensar así, pero no tengo más remedio. Así, recuperaré mi vida. Mi verdadera vida.

Dejo la ropa, ordenada, encima de una cómoda. La llevaría al cesto, pero lo veo demasiado lejos. Me enciendo un último cigarro, mientras busco mi emisora preferida. No sé porque se ha desintonizado; esta algo viejo, mira, algo viejo en mi lujoso apartamento. Un regalo de mi abuelo que jamás me iba a desprender de él. Marta estuvo a punto de tirármelo en una de nuestras peleas. Localizo la emisora, por fin estoy tumbado. Estoy cansado, demasiado; cierro los ojos e intento relajarme. Cinco minutos después, cuando me sentía algo más relajado, suena de nuevo el teléfono. Inquieto, me levanto de la cama sobresaltado. Esta vez sí que llego a tiempo, antes de que suene el contestador. Quizás es María, que se arrepiente de la cita o quizás se haya ido de la fiesta, supongo que tiene que haber acabado ya. Pero no, estoy equivocado. Al descolgar, oigo la voz amenazante, veo que no ha cambiado nada, de Marta. Me indica que no vaya a la cita de mañana; me pregunto cómo se habrá enterado. Parece que suplica, pero eso es imposible. Al no responder, pega un fuerte grito y vuelve amenazar acaloradamente, que si acepto la invitación, lo voy a pagar caro. No digo nada. Suspiro profundamente, lamentado el estado de ella, y mi cobardía al no responder. Descuelgo sin más y regreso a la vacía cama. Vuelvo a cerrar los ojos y una sonrisa estúpida dibuja mi cara. Mañana, pienso con cierta inquietud, ganaré la guerra.

viernes, 3 de agosto de 2012

RELATO VII (XI)

Entrada Original, Sábado 14 de Mayo del 2011


VIII

Estábamos algo cansadas y con la boca algo seca de tanto hablar. Nos habíamos bebido toda el agua y quedaba una única manzana; parecía la del pecado, ya que ninguna de las dos nos atrevimos a cogerle y darle el primer mordisco. Quedaban tres cigarros, entre las dos nos habíamos fumado casi un paquete entero. Ella fumaba más que yo. Nunca imaginé hablar tanto tiempo con una persona desconocida y menos de temas tan importantes de mi vida. La complicidad era palpable, por parte de las dos; su confianza me alegraba el alma. Las caricias habían cesado a medida que pasaba el tiempo, pero era como si sus manos no hubieran cesado de acariciar mi cuerpo, porque los nervios no pararon en todo el encuentro. Era como si me conociera de toda la vida; ella también tenía esa sensación, ya que se notaba que la complicidad era mutua, y su sonrisa dibujada en su rostro, delataba, que a pesar de contarme temas bastantes peliagudos, estaba relajada, y encantada de habernos cruzado; me mostraba su dentadura blanca, entre unos labios finos, con poco maquillaje, y de una hermosura que me cautivó desde el principio. Sentir su primer beso en mis labios, fue algo extraordinario y extraño a la vez. Nunca había besado a una mujer.

Nos habíamos levantado para poder estirar un rato las piernas; decidimos acercarnos al estanque. Mientras nos dirigíamos allí, con pasos cortos, pausados, continuó contándome la historia sobre el primer contacto con Miguel. Él solo le ofrecía una bonita amistad, pero ella quería conseguir algo más que eso. Estaba totalmente obsesionada con él. Los estudios, ya abandonados, las broncas familiares, la dejadez, le hizo ocurrir a las pastillas, que combinado con alcohol, le hizo estallar al borde de la locura. Incluso, intentó en dos ocasiones suicidarse; bueno eso hizo creer a la gente para llamar la atención. A todo el mundo se lo hizo saber llegando a oídos de Miguel, que una vez más le demostró su verdadera amistad. Quedó con ella en los billares; ella llevaba dos copas de más. En el bolso, escondidas, un par de pastillas de éxtasis, que esa noche no pensaba tomar, aunque las llevaba preparadas para lo que pudiera ocurrir. Con paciencia, Miguel le trató de quitar la copa que llevaba en la mano; le gustaba, pero no quería implicarse por todos los rumores que corrían sobre él. No le importaba, pero quería evitar el tema para callarlos de una vez; podría arruinar su gran carrera, por eso, y por él mismo, quería ser prudente. Pero esa noche, junto al billar, viéndola en el estado que se encontraba, la abrazó con fuerzas, quitándole el vaso, que cayó al suelo, por suerte era de plástico, y le beso en las mejillas. De los ojos de María estallaron lágrimas, que recorrieron amargamente su cara; se apoyó en sus hombros y le beso. No se apartó para no herirla y en parte, porque dentro de su corazón, estaba naciendo sentimientos hacía ella. Se besaron durante minutos, que para María fueron segundos, y quizás para Miguel fueron horas.

Minutos más tarde, algo más calmada, incluso algo serena, hablaron de los ratos amargos que pasaba María, de las peleas con sus amigos, familia, de los estudios. Estaba en el último curso y no podía desaprovechar las buenas notas, incluso trabajos en la galería, conseguido con grandes esfuerzos. Tras aquella noche María volvió a ser la mujer de antes, gracias a la relación que mantuvo con Miguel; en poco tiempo, volvió a maquillarse, recuperó las notas, realizó los trabajos pendientes, volvió hablar con sus amigos. Le gente la empezó a ver con ojos diferentes, tanto a ella, como a él, y eso cambió toda la situación. Los rumores, poco a poco iban cesando y la relación fue estable, bonita mientras duró. Aunque todo el mundo sabía que la relación había empezado por la obsesión de María hacia Miguel, las locuras cometidas, le dieron una oportunidad. Aunque esa situación duró hasta febrero, dos semanas antes de los exámenes. Estaban a punto de comenzar la semana difícil para los estudiantes y profesores. Fue dura, ya que los trabajos se amontonaban en las aulas; para unos corregirlos, preparar todo, para otros dedicar horas y horas a estudiar en la biblioteca de la universidad o de alrededores. Se pasaban horas sin dormir, sin descansar para poder llegar a entregar todos los trabajos, tener las lecciones aprendidas. María trabajó duramente para poder recuperar todo el tiempo perdido por sus excesos; por fortuna lo hizo excelentemente. Se preparó los exámenes a conciencia, dedicándole horas y horas al estudio. Los trabajos los preparó a conciencia y pidió ayuda a los profesores para hacer repaso. Se dio cuenta que había perdido el tiempo. La relación con Miguel iba bien, pero tuvieron que dejar de verse para poder hacer todo. Los dos tenían demasiado trabajo. A dudas pena se veían y el poco rato que estaban juntos discutían por el estrés. Al principio no le dieron importancia, pero poco a poco, algo cambio en la forma de ser de Miguel, que ella percibía a diario. Demasiados cambios en poco tiempo. Una montaña rusa parecía su vida, estaba bien, como al día siguiente estaba realmente mal. Él se volvió demasiado brusco, violento, de forma repentina cambiaba de humor, incluso en las clases. Se opuso rotundamente hacer cambios en fechas de entregas de los trabajos, incluso a los alumnos que enfermaron, cuando antes no tenía ningún tipo de problema en ayudar y facilitar las tareas. Los rumores volvieron a correr, a dispararse, corriendo como la pólvora de boca en boca y eso asustó a María. Pero como no quería volver a caer, ni estar sola, ella volvió hacer caso omiso a los rumores y lucho por mantener la relación. Los amigos le volvieron advertir del tema, esa relación nunca funcionó, y ambos lo sabían.

Hicimos una pausa. No podía entender como María había llegado a ese extremo de enamorarse y arrastrarse de tal manera, pero por otra parte podía entender que el amor es así de loco. Estábamos cerca del estanque, y allí mismo me beso de nuevo. No había derramado ni una sola lagrima y eso me hizo pensar que era muy fuerte o que había superado todo tan rápido. Tampoco quería juzgarla. Nos sentemos en la orilla del viejo embarcadero, mojándonos los pies. Nos miremos embobadas, nos dimos otro beso, sintiendo sus manos en mi pecho. Me sentía rara, extraña, pero a la vez maravillada. Al separarnos, sonreímos como dos colegialas; me acaricio el brazo, bajo hasta la mano y así prosiguió contando lo sucedido.

Tras las últimas peleas estúpidas, y de estar estudiando bastante para los exámenes, decidió tomarse un respiro. Llamó primero por teléfono a Miguel; este contestó malhumorado, pero al final accedió para poder hablar del tema, que había estado evitando durante días. Él estaba dispuesto a rectificar, aunque no reconoció el error, al igual que hizo ella. Quedaron a las seis de la tarde. Llegó puntual a la cita, no quería ponerle nervioso, ni que se inquietara por nada. Tenía que empezar con buen pie. El pequeño piso alquilado, estaba completamente desordenado. Él le abrió la puerta con mal aspecto. Olía a sudor y mezclado con el fuerte olor del ambientador, apestaba el pequeño piso. No le dijo nada para que no se inquietase y le empezara a gritar, había ido a solucionar las cosas. No se había afeitado durante semanas y no se asomaba por la ducha durante días. Le dio un beso con asco, pero bastante eficaz para no levantar sospecha. Se le quito las ganas de hablar con él, pero tenía que hacerlo para solucionar sus problemas lo más antes posible. Volvía a tener miedo y no quería volver a caer en la tentación de ser irresponsable. Reconoció su culpa la primera vez, pero en esta ocasión no.

Se miraron fijamente sin saber que decir, como empezar. Él se sentó en el sofá, roto por quemaduras; había ropa sucia encima del sofá, pero Miguel ni se inmutó. Ella apartó unos papeles de una silla vieja, rota e inició la conversación. Le parecía increíble el cambio que había dado. En clase, vestido siempre elegantemente, perfumado, bien afeitado y ahora, hecho un asco. Había terminado de corregir unos trabajos y a las clases ya casi no asistía, preparando los últimos exámenes. Esto último estaba a la orden de todos los profesores. Por la expresión de su cara hacía rato que se había levantado. Me ofreció, en voz baja, si quería tomar algo. Por la suciedad de la casa le dije que no. Él, despacio, se levantó dirigiéndose a ella, que asustándose por la expresión de su rostro y sus ojos, se echó para atrás. Le agarro fuertemente, sin venir a cuento, le besó bruscamente y le propinó una buena bofetada. Ella gimió de dolor. Le sangraba la comisura de los labios. Le volvió a besar con fuerza, agarrándola fuertemente los brazos. Quiso gritar, pero la voz no le salió. La arrastró hasta la puerta de la habitación. Forcejeó, agarrándose fuertemente en el marco, arrancándose dos uñas de cuajo. La arrastró hasta la cama sucia, desecha desde días, con las sabanas sucias. La tumbó con violencia, le ató las manos, incluso los pies. Con lágrimas en los ojos, me confesó que aquello le excitó, pero que a la vez deseo con todas sus fuerzas que la dejara marchar. Le suplicó, diciéndole que no le diría nada a nadie, que la dejara ir. Lloraba, forcejeaba con las cuerdas. Miguel fuera de sí, la golpeó fuertemente en la cara, dejándola sin conocimiento.

Sin saber ni como, ni cuánto tiempo, María se despertó en la cama de la residencia. Él estaba sentado al lado suyo. Tenía los ojos rojos de tanto llorar, y le temblaban las manos. Tenía los nudillos enrojecidos. María sentía un dolor fuerte en su rostro y en la vagina. Quiso incorporarse pero no pudo. No recordaba bien lo que había ocurrido exactamente; tenía frio, tenía miedo. No se atrevió abrir la boca. Mientras tanto Miguel, le volvió a pedir que olvidara lo ocurrido, que le perdonara, que la amaba con locura. Se puso a llorar como un niño pequeño, y le miró con ternura. Ella le creyó. Pensó en darle una oportunidad, tal como hizo él con ella. Aunque temerosa, temblando, le acarició la cara. La verdad que tenía miedo a dejarle porque creía que se iba a quedar sola, y que el comportamiento de Miguel podía cambiar. Las dudas le invadían la mente, pero creía no tener otra opción.

Me quedé helada al oír las duras palabras de María, y no supe reaccionar. Le pasé el brazo por encima del hombro para intentar calmarla. Había empezado a temblar, recordando el dolor. Yo pensé que al principio la culpa había sido suya, por haberse obsesionado con él, y también por haberse dejado atar en la cama, en las primeras relaciones sexuales; le gustaba, pero aquello era demasiado fuerte para mis oídos. Paralizada por su miedo, por su reacción, no pude comprender porque le dio una segunda oportunidad. Si, él se la había dado, pero no era cuestión de perdonar una cosa así, demasiado para una chica tan dulce y amable como ella. Podría haber perdido la carrera por aquel hombre. Y él, tan cobarde, pegándola, queriendo demostrar que era suya y de nadie más, y que la tenía en sus manos. Tuve que encender otro cigarro para calmar mis nervios. Su dolor, en ese instante, lo hizo mío.

Continuó contándome que los demás compañeros le preguntaron por los golpes marcados en su rostro. Puso la típica excusa, que se había resbalado en la ducha. Podría haber dicho que se había caído por las escaleras, le hubiera servido igual. No supo bien si se lo creyeron o no, pero la cuestión era es que nadie indagó en si aquello era cierto o no, nadie le iba ayudar, aunque no tenían porque, si ella contaba que sus moratones era por caídas. Ningún compañero se atrevió a preguntarla la verdadera razón de sus cardenales. Él único que puso verdadero interés fue Marcos.

El mes de febrero ya estaba encima y los exámenes habían comenzado. Las notas de los trabajos las iban poniendo en los paneles. A ella le habían ido bien. Algunos controles fueron duros, pero los superó sin ningún tipo de problemas. Los esfuerzos habían valido la pena. El cuadro lo había terminado a tiempo y a Marcos le había gustado mucho. Le propuso hacer una pequeña exposición en una de las salas de Salamanca. Fue el principio de la relación y de hablar con él algo más en serio. Cuando tuvo la oportunidad de quedarse a solas con ella, le preguntó por los moratones, pero ella no contesto. Los ojos entristecidos, llenos de lágrimas amargas, le dio la respuesta adecuada, aunque ella no hubiera contestado. María se marcho, sin contestar respeto a la exposición y se fue a refugiar a los brazos de su novio, como si fueran un buen refugio. La relación con él había cambiado algo, pero ella sentía miedo cada vez que estaba a su lado, pero se contradecía cada dos por tres. A veces pensaba en dejarle y otras continuaba felizmente con él. Era contradicciones que nadie entendía. El interés que mostró Marcos por ella, le abrió el camino para darse cuenta que tenía que dejarle y volver a empezar lejos de allí. Su carrera estaba a punto de terminar y no podía perder el tiempo con aquella persona que tanto daño le hacía. Pero no se atrevía a decirle nada; se sentía amenazada, y dejarle podía costarle la vida. Las relaciones sexuales con él eran escasas y eso le ponía furioso a un Miguel tan distinto a la persona dulce que fue en su momento. Pensó en todos los rumores que se habían dicho. La gota de la paciencia se estaba acabando y una noche, en la misma habitación, pero esta vez limpia, ordenada y bien ambientada, después de una cena intima, tuvo la oportunidad de hablar con él y dejar las cosas claras. Habían cenado algo ligero y habían bebido algo de vino. Él más que ella. Quería estar ebria para hablar con él con claridad, y así, poder marcharse por su propio pie si se ponían las cosas feas. No era cuestión de estar borracha y no poder escabullirse. Mientras cenaron no hablaron de nada en concreto y fue bien aburrido. Trato de sacar el tema, pero el miedo le invadía y tampoco tuvo oportunidad. Él solo hablaba de tonterías y casi no la dejaba hablar. Después se sentaron en el sofá. La cogió de la mano. Temblaba de miedo pero seguía sin atreverse a decir nada. Todo lo que había pensado no le salía en palabras. Se arrepintió de haber aceptado la invitación. Él se acercó a sus labios y le beso apasionadamente, con fuerza. Se dejo llevar por un instante, pero sus manos sudaban por el miedo. Las de él, apretaban sus brazos con una fuerza brutal. La hacía daño; quiso chillar, pero se paralizó por el terror que recorría sus venas. Sus besos pasaron a ser mordiscos, y sus manos abarcaban su cuerpo, con fuerza, sin dejarla a penas mover. La lengua recorrió su cuerpo. La llevo a la cama. No se detuvo antes los sollozos de ella. Le suplicó, pero hizo caso omiso. Le volvió a golpear para que se callara; salvajemente le propinó puñetazos; le tapo la boca. Él se excitaba cada vez más, al verla llorar, al verla sufrir. La pegó de nuevo, y la violó sin ningún tipo de compasión. Después, como si no hubiera pasado nada, la limpio la sangre en la bañera. La lleno de agua caliente, y la enjabonó con extrema suavidad, como si se tratara de otra persona, como si ella le hubiera pedido ayuda a él.

Después la seco con mucho cuidado, la llevo a la cama y allí la abrazó. Ella no dijo nada, se dejo hacer. Se quedó callada sin saber qué hacer en ese momento. Se sintió sucia por dentro, vacía, extremadamente estúpida por no haber reaccionado. Pensaba en que si hablaba Miguel era capaz de matarla. Pero tenía que hablar con alguien. Tenía que huir de su lado, pensar en el mañana, en su futuro.

Al día siguiente volvió a mentir a sus compañeros. Las preguntas fueron directas y concretas. La gente ya imaginaba que era Miguel quien le golpeaba. Algunos comentaron que ella se lo había buscado, al principio sí, pensé yo, no lo niego, pero después la violencia fue por parte de él, tan solo de él. Los rumores eran ciertos. Ella esquivo las preguntas como pudo, pero Marcos no se lo permitió. María aquella tarde, salió escopeteada de la clase de Marcos, antes de que Miguel la pasara a buscar. Marcos sabía el por qué y tenía que pararle los pies, y a ella ayudarla en todo lo que pudiera. No podía permitir que esa mujer destrozara su vida por un hijo de puta así. Era cuestión de tiempo que hiciera algo más. Por eso, salió tras ella y en uno de los pasillos se puso delante de ella para que no pudiera huir y esquivar sus preguntas. Fue directo al grano, sin ningún tipo de pudor. Ella lo negó al principio pero sus lágrimas la delataron. No aguanto más, el dolor, el sufrimiento que Miguel le estaba causando. Y decidió hablar con él. Se fueron por la puerta de emergencia para que la gente, compañeros, no va vieran salir de esa manera. La llevo a su casa, y allí hablaron con tranquilidad. No entendí bien porque María no decidió denunciar a un hombre tan deplorable. No lo entendí, pero ella tampoco pudo darme una explicación lógica. Respeté su decisión, pero para nada la compartía.

Lo difícil para ella fueron las semanas siguientes. Miguel se opuso rotundamente a la ruptura. Le pidió perdón con ramos de flores, llamadas continuas, incluso se puso de rodilla… pero María ya no aceptaba su perdón, ni los regalos. Marcos le ayudó a superar sus miedos y se enamoraron. A los cuatro meses de todo aquello se fueron a vivir juntos. Pero ella, aunque le amaba con locura, y así era, necesitaba olvidar todo el asunto y desaparecer una temporada. Tenía que encontrarse a sí misma y recuperar el tiempo perdido, trabajar en los cuadros olvidados… por eso decidió ir a París durante un tiempo para desconectar del todo y de todos.

jueves, 2 de agosto de 2012

LAS VACACIONES QUE NO LO SON

Noche calurosa la de este 3 de Agosto del 2012. Me fui a la cama alrededor de las 3.30 y he dado demasiadas vueltas; falta de sueño y con la calor no puedo dormir, por eso he decidido levantarme, aunque mañana, es decir, dentro de nada, me tengo que levantar para trabajar. Pero no hay manera de poder dormir, ni con el aire acondicionado puesto, Morfeo no llega y los minutos pasan; ya ves, son ahora mismo las 4.51 y aquí ando escribiendo esta entrada. Hacía tiempo que no escribía a estás horas, pero es que no hay manera de pegar ojo, y eso que la siesta ha sido corta, porque si hubiera sido como otras veces, pues mira, yo me lo hubiera buscado.

Pues nada, aprovecho para escribir esta entrada y mañana viernes ya descansaré. Empezare explicando que este fin de semana, lo volveré a pasar junto a mi hijo. El lunes se va de vacaciones a Menorca, con la familia materna y hasta mediados de septiembre no le volveré a ver, ya que yo marcho a Italia, como explico en una de mis anteriores entradas, y para el 22 de Agosto, más o menos, eso ya se ira viendo, marchare a Sídney, unas tres semanas más o menos; este año no voy a ir más tiempo porque tengo otros proyectos que realizar en otros lados y con ese tiempo será suficiente para grabar los spots más importantes, todo esta sincronizado, todo esta preparado para que nada falle y si fuera necesario, pues me quedaría un mes, pero espero que no sea más tiempo; primero porque tanto tiempo sin ver a mi hijo no sé si podría estar (este año no me va acompañar, y entiendo a Lucia que quiera pasar las vacaciones con su familia. Y este año ire solo a Sidney ya que necesito a todo mi equipo en Madrid) y segundo por otros proyectos tal como he dicho antes; este 2012, aunque ya lo he dicho en varias ocasiones, está siendo distintos a otros años, y con tanto trabajo, pues voy organizando la agenda según convenga, según sea necesario estar en un lado u otro. Incluido Madrid.

Aún no sé bien cuando me voy a ir para Italia, pero me imagino que será la próxima semana. Eloy, mi brazo derecho para los que no lo sabéis, está de vacaciones, y pondré a Susana al cargo de las cosillas que puedan ir surgiendo en Madrid. La mitad de la gente está de vacaciones, pero todo está bien controlado, no hay fallos, no hay errores y estamos cumpliendo con todos los plazos; eso nunca ha sido problemas, pero si es cierto que estamos dando el cien por cien, más diría. Pero el reto ha formado parte de mi vida y cumplirlos, es la mayor satisfacción que puedo lograr. Por eso la importancia del buen ambiente, del buen rollo que tenemos entre nosotros, del buen equipo. Mi trabajo me satisface diariamente, aunque como en todos lados, hay días malos y buenos, pero entre nosotros hay buen rollo y somos capaces de dialogar cuando es necesario; a veces no es fácil ser jefe, y tener todo organizado, pero mis compañeros (empleados) son buenos profesionales, y no me dan demasiados problemas, aunque obvio que a veces les tengo que echar bronca, pero siempre con respeto, que es lo que importa. De esto ya he hablado en otras ocasiones, pero este año, me siento más orgulloso, si cabe, de tener el equipo que tengo, de grabar los spots que hemos grabado, de la organización, de las risas que nos pegamos, del trabajo que realizamos, de las horas que hemos echado, de los viajes, este año 2012 está siendo un buen año y los contratos con las firmas se renuevan solas y hemos conseguido los objetivos; más que eso, nuevos contratos, los cinco premios, reconocimientos y la satisfacción que te digan que eres buen profesional. Estar rodeado de mis compañeros es un gran orgullo, como persona, como amigo, como jefe, todo está unido y eso es lo mejor que nos puede suceder.

He titulado la entrada así, porque este año no voy a tener vacaciones; el año pasado si pude cogerlas (estuve en la casa que tengo en Segur de Calafell), pero este año es imposible tenerlas, ni tan siquiera una semana; lo bueno, es que estaré, una vez más en Australia y podré disfrutar del tiempo libre en esa ciudad, que año tras año, me cautiva (este año saldré desde Italia para  Sidney e ire solo, porque necesito a mi equipo entero en Madrid, cosas de proyectos y así se hará). Como allí ya tengo amigos, algunos de ellos forman parte de Aussebum, y gente que he ido conociendo con el tiempo, pues disfrutaré de las noches que salga, de cenas, de conocer rincones que aún no conozco, y de sexo. No son vacaciones, y estaré ocupado, pero estar allí es un privilegio que no puedo negar; al igual que mis viajes, pero de este tema también he hablado en anteriores entradas y no es cuestión de repetirme, aunque podría hacerlo no? 

Pues creo que con esto es suficiente, y tan solo me queda deciros que nos vamos leyendo en las redes sociales y los que me conocéis pues antes de irme, espero que nos podamos despedir en persona.

Besotazos y hasta la próxima.

IPHONE

Entrada Original, Miércoles, 11 de Mayo del 2011


Todo el mundo me convenció para comprarme un Iphone y maldita la hora que me deje llevar por el impulso que tuvo de comprármelo. La verdad que estoy encabronado, muy cabreado con los de Apple en general. A ver si me tranquilizo y puedo explicar una vez más, otra puta incidencia. Hoy creo que va a estar lleno de tacos. Si la otra vez no iba contra ellos, ni sus productos, creo que esta vez me voy a quedar corto.

Vamos al lio. Creo que tengo que tener el gafe “iphonero” porque lo que me está pasando no es normal. Esta es mi tercera entrada sobre el Iphone, en realidad sería la cuarta, pero el anterior problema me ahorre de contarlo. Tras la incidencia de Itunes e Iphone, que realmente era por culpa de Windows, y de habérmelo solucionado, y de haberme regalado un año extra del seguro, y de haberse disculpado, en el puto Iphone, me salió un poro, una burbuja, un picotazo en el cristal, pero por dentro del Iphone. Y para joder más la marrana, al lado “destellaba” unas líneas amarillas. Cabreo doble. Llamo a su servicio técnico para ver qué solución me podían dar, menos mal que localicé un 900, porque me clavaron 35 pavos la primera vez que les llame por pocos minutos que estuve hablando con ellos. Eso sí, amables cien por cien, eso no lo niego, y serviciales. Me comunican que al tener seguro, me tienen que dar uno NUEVO sin ninguna explicación, ya que según les conté, eso era un error del Iphone, que había salido defectuoso en una de las producciones; es decir, admitían que seguramente a más de uno le puede pasar, y si tiene la suerte, pues no le pasara nada. Que para ir rápido fuera a la tienda en Xanadú cosa que hice. Pues nada, me dan cita, me presento, y si, me atiende amables, y sin ningún problema, me comentan que me van a dar uno nuevo. La sorpresa, y sospecha, es que no me piden los accesorios, ni la caja de mi anterior teléfono. La chica que me atendió, se dirige al mostrador, y de una caja negra, de caucho o algo similar, saca un Iphone 4 de (32 mb), con su plástico y me comenta que es totalmente nuevo, pero que Apple siempre aparta una cierta cantidad para incidencias de producción, pero que no me preocupara, que era NUEVO. En fin, me convence su explicación, tampoco iba a desconfiar, mis datos de mi “viejo” Iphone me los borra delante mío, y éste me lo reinicia para que tenga línea. Y que desde casa, con mi última copia de seguridad, lo actualice y ya está. Todo rápido, todo muy bonito, me hace firmar una factura, con precio 0, les doy mi correo para enviar documentación y con un amplia sonrisa me dice, que si vuelvo a tener alguna cosa, pues me atenderán encantados. Supuestamente puedo tener mala suerte en una ocasión, pero ya dos y encima tomándonos el pelo, pues como va a ser que es mucha casualidad.

Esto fue el viernes 6 de mayo; ya por la noche en casa, lo actualizo desde mi copia de seguridad y todo de puta madre. Y como el fin de semana celebre mi cumple, 35 tacos cumplí el sábado 7 de mayo, aprovecho ya a decirlo, pues el teléfono a penas lo utilicé. Ya sabéis que lo celebre por todo lo alto y que llegué el domingo a las cinco de la tarde. Cena, copas, disco, y sexo. Mucho sexo.

Bueno, ese no es el tema… pues eso, a penas lo utilice hasta el domingo tarde-noche. Pues vi la primera incidencia. Estaba en Twitter y el teléfono se apaga y se reinicia solo. Pensé que batería y que bueno, a ver lo que pasaba. Pero ayer lunes, 9 de mayo, ya fue el colmo de los colmos. Por el día, la batería me duró menos de lo normal, pero no paso nada. Ya por la noche se me reinicio como 8 veces, cuales 3 de ellas seguida, no me localizaba la señal wifi, me indicaba que la contraseña era errónea, cuando se guarda la señal automáticamente… introducía la contraseña y nada. Mi wifi os aseguro que estaba perfectamente, pero no contento con esto, el Iphone se me reinicio totalmente solo, como os digo, ocho veces… hoy martes, ya llevo 7 reiniciaciones. Estoy cabreado, de mal humor, aunque intento reírme de esta situación, llamo al 900, y una gilipollas, de tantas que ahí, que por cierto no sabía que donde te atienden no están en España, me dice que no debí de hacer copia de seguridad y restaurarlo como nuevo, al menos lo intente. Le explicó la situación y dice que les envié el móvil por USP, totalmente gratis, vaya que “amabilidad”, que lo vienen a recoger y a los cinco o seis días me envían otro. Claro me quedo sin teléfono, porque a ellos le apetezca, no sé cuando me envían el mío, y no puedo hablar físicamente con alguien. Le pido cita de nuevo a Xanadú, que prefiero ir a la tienda (3 veces en NY), más dos veces aquí en Madrid, y que si yo pague 700 pavos (me lo compre libre) es para que funcione… o no?

En fin, que esta tarde de nuevo iré y creo que esta vez ya no seré tan amable y creo que con educación, se puede decir las cosas, pero se las voy a dejar bien claras las cosas, porque me pueden tomar el pelo una vez, pero dos va a ser que no.

Por la tarde me presentó unos 40 minutos antes, hablo con Jordi Sans, no estoy tan nervioso como la otra vez, pero quiero que acabe la pesadilla ya. Ahora que lo estoy escribiendo, ya no lo escribo en caliente, pues puedo reflexionar un poco más. Vuelvo a repetir que contra Apple no tengo nada, pero si que estoy jodido porque ya es el tercero que me dan esta vez. Sé que algunos pensareis que soy un pesado, pero es lo que quiero escribir en estos momentos.

Bueno, me atiende uno de los tecnicos y no me pone ninguna pega. Me confirma que el teléfono es nuevo, pero que viene separado de la producción, sin acesorios, pero esta certificado como nuevo y que he tenido mala suerte, pero que los teléfonos, y Apple no es perfecto y siente mucho lo ocurrido. Sin más, le digo las cosas claras, con educación. Me da otro teléfono nuevo, con una disculpas. Es cierto que me regalaron un año más de garantía, y eso se agradece.

Llegó a casa, lo restauro con el Itunes, y me dió un pequeño problema, que resolví rápidamente, y por mi cabezoneria. Ahora que tengo este Iphone, nuevo, que aún no me lo acabo de creer del todo, puedo deciros, ya más calmado que va de puta madre, pero espero que está vez sea el definitivo...

Nada más que añadir, espero no tener que hacer ninguna entrada más, aunque nunca se sabe.

Hasta la proxima.