Parece ser que las cosas se han calmado un poco y puedo llegar a respirar. Venir a tierras Toscanas, me ha sentado de maravilla; reencontrarme con viejos amigos, algunos de ellos publicistas como yo, y otros que no tienen nada que ver con mi mundo, me ha dado un poco de calma y alegría a la vez, porque reencontrarme con ellos, ha sido todo un bálsamo que necesitaba.
Siempre vamos necesitando cosas a lo largo de la vida, a veces son cosas materiales, la mayoría de ellas y otras son cosas humanas, como un abrazo, una caricia, una buena compañía, una charla, un abrazo, un bálsamo que nos hace respirar aire fresco y renovado, en nuestro día a día.
Como ya os conté, este 2012 necesitaría mínimo 14 meses para poder ir algo tranquilo, eso en lo laboral, porque en lo personal, las cosas llegan sin avisar, y vas viviendo al día, con las sorpresas que te da la vida, algunas agradables, otras no tanto y vas aceptando las cosas tal como te vienen, sino pues mal iríamos. La semana pasada, en la fría Holanda, pues pasé ese pequeño bache, que en esta tierra del buen vino y manjares suculentos, he salido a flote. Ya os dije que tenía que coger el toro por los cuernos y salir de esa situación en la que me encontraba, y así está siendo. Me encuentro mucho mejor, más aliviado, aunque el dolor no va a desaparecer, y sé que volverá más intenso, más fuerte, que empujara a sacar mi Asier triste; pero eso es ley de vida, no siempre podemos estar contentos, aunque no lo refleje en mi trabajo o no lo vaya contando, paso a paso, aunque más o menos lo puedo ir haciendo en mi blog, ya sabéis los motivos, que me tranquiliza y veo las cosas de otras perspectivas; yo dirijo mi vida, cada cual la suya, lo mejor posible, y bueno, este fin de semana pasado, estando con los viejos amigos, tomando esos vinos tan buenos, comiendo tan bien, riendo, viendo la lejanía lo sucedido apenas hace siete días… parece mentira como podemos bloquear algo que no nos interesa, podemos hablar de aquello o lo otro, como si no fuera la cosa con nosotros. Pero así somos los humanos, así es nuestra mente, que abre y cierra cajones del pasado, recuerdos imborrables, no todos son malos, y se vuelven a cerrar con llave; no siempre se puede abrir, no siempre se cierran.
Pues bien, mi situación ha cambiado y estoy alegre, estoy receptivo; no voy a contar mucho más, porque siempre me reservo cosas para mi intimidad, aunque a veces suelte mi lado gamberrete, pero no siempre se puede contar todo, y más aún cuando la cosa no es solo mía. Y como sé que me entendéis, y no sois curiosos, lo dejamos aquí. Lo importante es que estoy mucho mejor, que el trabajo me llena, que mi hijo esta súper bien, que va hacer ya tres meses que va la guardería y que Lucia vive ya de nuevo en su casa y también esta súper tranquila.
Me encantan estás entradas cuando son tan claras, cuando explico exactamente lo que tengo que explicar, y son cosas bonitas, que tras publicar algunas entradas antiguas, ve lo pesados que llegan a ser algunos, y el bucle de la red social, me apetecía escribir esta entradilla, y decir, que no me pienso rendir, por muy pesados que sean, por muy mal que hablen de mí, porque en este país de envidia y de panderetas, no se puede esperar otra cosa.
Si alguien no entiende porque publico entradas antiguas, os lo vuelvo a decir brevemente: yo tenía mi anterior blog, que por accidente yo mismo borré y las pude recuperar de nuevo gracias a un colega del Twitter y como quiero tener todas mis entradas anteriores, más estás nuevas que escribo, decidí publicarlas tal como la escribí en su día, y así estoy haciendo. Sé que puede ser algo repetitivo, porque el bucle en mi vida es brutal, y aunque ya no hago caso a los comentarios, a la panda de envidiosos, siempre hay alguna razón que alguien me lo recuerda… y eso, que yo las voy a seguir publicando porque así lo deseo yo y como ya sabéis es mi blog, guste o no guste (tenía que decirlo, porque me sale de mis cojones), pero la opción es fácil, leer la entrada o no; así de sencillo. Espero que no tenga que volver a explicar el porqué público viejas entradas. Soy vasco y puedo ser: ¡muy borde!
Pues nada, un besotazo a todos y hasta la próxima.
Me alegro que estes mucho mejor, asi me gusta verte.
ResponderEliminarUn besotazo
Gracias tron, por todo tu apopyo, por leer mi blog, y ser buen amigo. Un besotazo
EliminarSimplemente decirte que me alegra que estés mejor.
ResponderEliminarUn abrazo,
Franek
Gracias chulo
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