HOY

Como habréis visto, mis dos anteriores entradas las he publicado seguidas para que tenga sentido lo que habéis leído, si es que lo hacéis. Al final me he decidido publicar todas las entradas de mi antiguo blog, con todas las consecuencias, que quizás pueda tener, al publicarlas de nuevo, pero como dice mi gran amigo Juan Ángel, yo quería tener de nuevo entero mi blog, y que solo me tiene que importar lo que yo piense, diga, o necesite hacer, y al resto, si le molesta, pues que se jodan. Y así suelo pensar yo, porque no hago o intento no hacer daño a nadie, aunque a veces acabe haciéndomelo a mí, o haciéndolo yo. Pero es mi decisión, es mi blog, y así lo he decidido.

Ya que pude recuperarlo, gracias a Francisco Javier, un twittero, pues las publico tal cual, y si molesta a esa persona que en su día fue mi Novio, pues que se aguante. La verdad que ya no tengo ninguna relación con él. Antes hablábamos, pero no sé porque, ni me importa, ni quiero saberlo, dejo de hacerlo. Decidió dejar de hablarme sin más, y decidí borrarle para siempre de mi vida. La verdad que en su momento me jodio, pero luego, con el tiempo, te das cuenta que esa persona realmente no valía la pena, y no perdí ni un segundo más con él.

Hoy, que por cierto, para los despistados, sigo soltero y dando guerra, caña, tomo la decisión de publicar las dos entradas seguidas, desde la suit del hotel donde me encuentro. Estoy en Dordrecht, la cuarta ciudad más grande de Holanda. He venido por trabajo, hacer dos anuncios y posiblemente un tercero, que estoy en negociaciones. Me encuentro bien, echando de menos a mi gente, a mi hijo y bueno pensando en otras personas que no voy a nombrar, pero que ellos ya saben, que pienso, y bastante, en ellos. He venido solo; no he traído a nadie del equipo. Me hubiera gustado que alguien hubiera venido, pero me hacían más falta en Madrid, y bueno, me estoy apañando bien. Estoy haciendo más de diez horas, de trabajo, en grabaciones exteriores e interiores, mientras curro para otras marcas, firmas y países, sobre todo para Nueva York, que quizás este año retrase mi viaje, por circunstancias de agenda. No pierdo el tiempo. Grabo, imagino, pienso y le doy al teclado. Después de terminar en esta bella ciudad, marchare a la Toscana; no sé el tiempo que estaré allí. Me encanta mi trabajo, ¿se nota verdad?

Estoy sentado en el escritorio del hotel, hoy no digo el nombre, y estoy pensando en él. Hoy me ha dado una alegría, hoy me ha dado una buena noticia, aunque a penas hablemos, por causas que tampoco voy a explicaros, pero que sé que está ahí cuando le necesite, y yo estoy para él, aunque sea mas cerrado que yo y no le guste hablar muchos de sus sentimientos, sé que piensa en mí. Eso se sabe; la verdad que si estamos así, es culpa mía, pero bueno, él siempre me perdona todo, y su apoyo en la lejanía o cercanía, o en la situación que sea siempre la tengo. Ojala que lea esta entrada y me lo haga saber. Quien sabe, quizás me lo dice, quizás no.

Pues eso, hoy, me voy a sentir bien, de echo me siento bien, por mi trabajo, por publicar mi entradas, por tener mi blog entero, por contar cosas positivas, otras no tanto, pero me siento como liberado. Quizás mañana no me sienta así, o quizás me arrepienta, pero asumo lo que hago, y no escondo. Le dejé bien claro las cosas, no supo asumirlo y decidió pasar al lado oscuro. Me la pela, yo soy feliz, me siento lleno, orgulloso de mi trabajo y de mis creaciones; él no creo que se sienta así y el muy cobarde no me dijo nada cuando le dije lo que pensaba. En fin, si para sentirse bien, a su modo, se une a mis enemigos, pues que le den.

Pues nada, ya escribí lo que necesitaba escribir, y aquí os dejo unos besotazos para repartir.

Hasta la próxima.